Aquí un servidor, siempre ha sido firme defensor de los cambios en la nomenclatura de las calles de cualquier ciudad, siempre y cuando estos cambios repercutan en beneficio para el común. En el ámbito comercial y de marketing, el que una determinada calle tenga un nombre sonoro u original, puede provocar un "efecto marca", que repercuta positivamente en el entorno, ya que genera una identidad, una personalidad. Todo el mundo estará de acuerdo que vías con nombres tan sugerentes como Paseo del Prado, Paseo de Gracia, Paseo de las Delicias o Campos Elíseos, engrandecen la imagen glamurosa y comercial que se le quiere dar a un lugar.
En nuestra propia ciudad, hay que reconocer que suena mucho mejor llamar a una vía Avenida del Mediterráneo, que su anterior nombre, Carretera de Ocaña. Desde aquí, en las redes, solicité hace tiempo al ayuntamiento el renombramiento de algunas avenidas con nombres tan feos e impersonales como Avenida de Ronda o Carretera de Circunvalación, que son nombres que inspiran a cuasi marginalidad. Para el primer caso, propuse nombres como AVENIDA DEL CID o AVENIDA CORONA DE ARAGÓN, ambos, nombres sonoros, con empaque, que encuadran a la perfección con nuestra ciudad. En el segundo caso, dado que la vía se encuentra junto a Marina Española, propuse nombres de marinos insignes para renombrarla, como Alvaro de Bazán, Blas de Lezo o J.S.Elcano.
En aquel caso, nadie hizo caso de la propuesta. Sin embargo ahora a esta corporación, le ha entrado la fiebre por el cambio de nombres. Pero no por motivos de imagen, que repercutan en algún tipo de beneficio comercial, ni por motivos de relevancia, para homenajear a alguna personalidad o héroe nacional. Los motivos, son únicamente políticos.
Esta nueva moda de cambiar calles arbitrariamente, se lleva a cabo al calor de la famosa ley-Zapatero de la Memoria Histórica, por la cual, ciertos señores socialistas pretenden cambiar y ocultar la historia de España a golpe de decreto.
¿QUÉ CALLES QUIEREN CAMBIAR?
En principio, la lista de calles que quieren eliminar es esta: Alcázar de Toledos, Andrés Amado, Eugenio Montes, Federico García Sanchiz, González Bueno, José María Pemán, Ricardo León, Tropas Gallegas, Vázquez de Mella, Belchite, Brunete, Plaza Santuario, Alto de los Leones, Luis Batllés, Alférez Provisionales, Maestro Sedano Serna y Plaza Cura José María Amat Martínez. Quieren además cambiar el nombre de algunos barrios, como el José Antonio, o retirar las placas del Ministerio de la Vivienda.
Me gustaría invitar desde aquí a nuestro excelentísimo alcalde, el Sr. Alfaro, o el ideólogo de todo este casino, el Sr. Valero Escandell, a que nos aclarasen a los eldenses cuales son exactamente los delitos de los que se acusa a personajes como Jose María Pemán, Ricardo León, García Sanchiz o Vázquez de Mella. Todos ellos escritores, periodistas, poetas, o literatos. Algunos muertos incluso antes de la guerra. Supongo que el hecho de no ser marxistas les veta del derecho de contar con una calle a su nombre.
Quieren retirar también una calle dedicada al párroco de Santa Ana, José María Amat, que es gracias a quien el templo fue reconstruido en los años 40. Supongo que a los señores del equipo de gobierno lo que les molesta es justo este hecho. Quizá prefiriesen dedicarle dicha calle a sus correligionarios de partido e ideología, que son quienes la incendiaron, saquearon y derribaron la iglesia, asesinando al cura y a quienes habían en su interior.
Porque claro, esta "Memoria Histórica", podría llamarse perfectamente "Memoria Caprichosa", pues es una corriente encargada de hacer una limpieza ideológica de todo aquello que no sea socialista. Tilda además de criminal, a todo aquel crimen que estuviera cometido por cualquiera, excepto por señores socialistas. Dice nuestro alcalde, que muchas de estas calles, fueron nombradas de tal forma en 1939, con la intención de "exaltar el nuevo régimen".
Es curioso, porque eso, exaltar a los suyos nada más llegar al poder, es justo lo que hizo el socialista Roberto García Blanes, quien en su primer pleno como alcalde, en 1979, ordenó la comisión que acabaría nombrando la calle más larga de Elda con el nombre nada menos que del fundador del partido socialista, Pablo Iglesias.
Dado que a los señores socialistas les interesa tanto la memoria histórica, les invitaría, (por aquello del hacer memoria y no olvidar) que hicieran un repaso de todos los delitos de sangre y crímenes de lesa humanidad que a lo largo de la década de 1930 cometieron los miembros de los partidos socialista y comunista. Pueden por ejemplo, leerse los mítines que daba su presidente, el Sr. Largo Caballero en 1933, pidiendo ir a la guerra para que se instaurara el comunismo por las armas. O les puedo recordar como las izquierdas republicanas fueron tríplemente golpistas (1931, 1934 y 1936). O les puedo recordar como su presidente desvalijó todo el oro del Banco de España. O si quieren, les puedo recordar como muchos de estos miembros socialistas con delitos a sus espaldas desde la guerra, quedaron con expedientes limpios como una patena tras la Ley de Amnistía (46/1977).
Así si tenemos memoria, la tendremos para todos por igual, y será de verdad memoria histórica, y no como ahora, que tan solo se queda en memoria más histérica que histórica, selectiva, y bastante caprichosa.
No caeríamos pues, en ridículos como pedir que se eliminen las placas del Ministerio de la Vivienda de Franco que hay en los edificios que dicho gobierno construyó. No sea que a los vecinos les de por preguntarse al ver esos carteles, por qué con Franco la gente humilde y trabajadora tenía vivienda protegida a precios asequibles, mientras que con el Sr. Zapatero tenían que empufarse con hipotecas de 40 años.
LA CRUZ DE LOS CAÍDOS
La Cruz de los Caídos es uno de los pocos monumentos que tiene Elda, y uno de los más antiguos.
Hace ya un par de años, el último artículo que publiqué en esta misma página, iba precisamente dedicado a dicho lugar. En lugar de hacer lo que han venido haciendo las corporaciones socialistas, de tratar de ocultar y tapar el monumento detrás de palmeras, pedí abiertamente que se pusiera en valor.
Dicho monumento tiene las características perfectas para hacer lo mismo que se hace en cualquier país del mundo, que es homenajear a sus caídos en guerras. Propuse que se elaborara una lista con todos los nombres que se tenga constancia, de eldenses que hayan perdido la vida en cualquier guerra. Sin bandos, ni ideologías. Sin importar si estamos hablando de la Guerra Civil, de la Guerra Mundial, de la Guerra de Marruecos, de la Guerra de Cuba, de las Carlistadas, o de la que fuere. Incluyendose igual, a todo aquel, eldense o no, que perdiera la vida en Elda por motivo de alguna guerra (entre los cuales se encuentra, por ej. el suegro de Miguel Hernández que fue asesinado por cenetistas en la C. Jardines).
Que fácil y que sencillo. Un monumento que rinda recuerdo y memoria a todos los locales que hayan caído en guerra, cualquier guerra. Gente con nombres y apellidos. Sin distinciones de motivos. Nada más memorable y a la vez conciliador que eso.
Pues no. El Sr. Valero Escandell, dice, según el Valle, que o se remodela el monumento para adecuarlo a su gusto, o que lo que hay que hacer es derribarlo por completo. Con un par, oiga.
Este señor, tan preocupado como se parecía mostrar siempre por el patrimonio local, en sus líneas en Valle o Alborada, ahora lanzando soflamas invitando a que uno de los hitos más notables del patrimonio monumental de la ciudad, sea derribado si no se adecua a su ideología. Algo que a mi me recuerda a fanatismos dignos de capítulos escabrosos, como cuando se derribaban cientos de iglesias con siglos de historia. Inaudito, pero tristemente cierto.
Desde aquí invito a los señores de la comisión a tomar en cuenta mi propuesta sobre la Cruz de los Caídos. Una propuesta de verdad histórica, integradora, que se convertiría además en un monumento visitable que despertaría la curiosidad de los vecinos a interesarse por la historia.
Volviendo al tema de las calles, ya que dice el Señor Alcalde que quieren poner nombres de mujeres a las calles, le propongo desde aquí que, si quiere dar ejemplo, RETIRE LA CALLE PABLO IGLESIAS, y esta sea renombrada en honor a la que posiblemente sea la mujer más poderosa y relevante que ha conocido el mundo en los últimos 5/6 siglos: ISABEL LA CATÓLICA.
Mucho me temo que ellos están más por la labor de mujeres cuota. Más de Leire Pajín.
Saludos cordiales, eldenses.
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